16 de julio (3ª parte)

A la tarde fuimos a la Gobernación a la visita con Maria, y con ella acabamos de entender que trámites nos hacia falta para poder lograr la licencia de construcción. Así que tomamos nota de todo y luego ella nos mostró la escuela que ella estaba construyendo.

Y luego nos dejó visitar la escuela que tiene alquilada en frente, pero ello nos dejó allí porque tenía que irse. Pues que peligro, nos dedicamos a recoger mangos (Fernando colgado de un árbol como un mono, digno de la foto que no le hicimos) y "mamoncillos" que es una fruta de un tamaño un poco mayor que la uva pero con una textura angustiosa la primera vez que la pruebas. Así que nos hinchamos de fruta y jugamos con los columpios como niños. Fué un rato divertidísimo.

Luego llamamos al ingeniero Alejandro Pacheco y le contratamos para hacer los ensayos de suelo del solar al día siguiente. Y a la noche después de pasearnos el Pastor Jaime en su moto, y andar por el paseo al lado del mar (calle 1ª), nos fuimos a cenar todos juntos una pizza gigantesca (para como 10 personas).

Artesanía Wayúu en la 1ª

Visita a Kamuchasain (2ª parte)

Los niños que asisten a la escuela de la ranchería Kamuchasain vienen en furgona de 4rancherias vecinas, y este transporte a veces funciona y a veces no. Pero a los niños se les ve felices de ir al colegio y los profesores son unas personas super implicadas, amables y también son indígenas.

LOS PROFESORES

Nos enseñaron la cocina del colegio, que está construida como sus casas tradicionales, con madera yotojoro que se saca del corazón del cactus cuando está seco.

Todos los niños nos siguieron hasta allí por no separarse de nosotros. Nos dijeron que la comida la dá El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), pero solo les dan para 50 niños y a la escuela asisten 115 niños. Así que se divide la comida, además de estar actualmente 5 días sin agua.

Luego seguimos visitando la ranchería, con su iglesia, sus casas y sus animales. Y su fábrica de "chirrinchi", bebida alcohólica de maíz fermentado destilado, al que le añaden amoníaco. Imposible probarlo!!!

SUS CASAS






LA IGLESIA





LOS ANIMALES





LA FÁBRICA DE "chirrinchi"

Los indígenas duermen en un "chinchorro", una hamaca que cuelgan dentro de casa o en una enramada de madera que usan para refrescarse. Porque si en Riohacha hace calor, en las rancherias en medio del desierto ni os cuento.

Bueno, y esto es un resumen de la visita a la ranchería. Porque podría seguir contando cosas y no pararía. Pero no me voy a dejar de decirles que los Wayúu tienen una cultura muy fuerte y que faltar a la palabra para ellos es tan grave, que se han llegado a matar familias enteras entre ellos por esa razón. Así que algo muy importante que nos dijeron desde el primer día, nunca rechaces la comida que te ofrezca un indígena aunque no te la vayas a comer, ya que se ofenden y te puedes jugar la vida solo por eso. Así que andamos con ojo.